Los mercados de Estados Unidos terminaron 2017 con una nota muy optimista ante resultados mucho más altos de lo previsto. Los activos de riesgo, el precio de las acciones y el alto rendimiento llegaron a nuevos niveles máximos de mercado sobre una base casi diaria en los meses finales de 2017. Con sólo breves y pequeños retrocesos, el índice de Standard & Poor's (S&P) 500 aumentó 21,83% en los 12 meses de 2017, con el mayor incremento en la segunda mitad del año. A medida que los mercados de valores aumentaron, les siguieron otras clases de activos de riesgo, incluyendo los de alto rendimiento. El índice de bonos corporativos de alto rendimiento de Bloomberg Barclays US llegó al 7.50% para el año. Este rendimiento fue impulsado principalmente por los bonos de calificación más baja, tales como los clasificados CAA que alcanzaron un promedio del 10,38% para el período.
La deuda de alto rendimiento siempre ha sido un híbrido, rastreando los movimientos de recursos propios (equity) y tasa de interés. El índice de Bloomberg Barclays, analizado en sus Research Notes, señala que desde 1984 los bonos de alto rendimiento tienen una correlación mensual más cercana al índice S&P 500, +0,58, que los bonos del gobierno, +0.08. La valoración de los bonos de alto rendimiento está impulsada fundamentalmente por el desempeño fundamental de la empresa emisora de la deuda, la estructura del instrumento y la dirección de los tipos de interés. Esta correlación histórica puede ser probada en el futuro a medida que la propagación del rendimiento entre la deuda de alto rendimiento y la tasa libre de riesgo del Tesoro se haya comprimido a un nivel que puede no ofrecer un buen amortiguador contra las tasas de interés crecientes.
Los mercados financieros superaron muchas incertidumbres, incluyendo las ambiguas expectativas del primer año de la administración de Trump, el intento fallido (hasta ahora) de revocar la ACA/Obamacare, el recorte de impuestos federales a última hora prácticamente a las carreras y loa aumentos adicionales de las tasas de la Fed. No obstante todas estas inquietudes, alimentadas por una prensa negativa y politizada, las ganancias corporativas aumentaron más de lo esperado y los mercados respondieron positivamente. Incluso con los logros alcanzados no es aventurado reconocer que en estos momentos los mercados de valores parecen estar más cerca de una situación de equilibrio versus los análisis pesimistas de que están sobrevaluados. Esto motiva a los inversionistas a inclinarse positivamente a una mayor participación en los mercados en 2018.
- Hits: 8528