Quiero compartir una mirada a la polémica visita a Cuba del Cardenal Sean Patrick O´Malley, Arzobispo de Boston en el Estado de Massachusetts, Estados Unidos, y uno de los principales consultores del Papa Francisco. Lo haré basándome en la crónica que publicó el propio prelado en su blog personal. La prensa oficial cubana publicó la noticia en primera plana del Granma expresando, además de los participantes en el encuentro con el Presidente, esto sobre el contenido de la visita:
“Su Eminencia, quien ha viajado anteriormente a Cuba, fue acogido con hospitalidad y respeto. Durante su estancia visitó lugares asociados a la actividad de la Iglesia y otros sitios de interés, como el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, donde recibió información sobre el esfuerzo nacional para desarrollar las vacunas, los medicamentos e incluso equipamientos con los que el país enfrenta la pandemia de COVID-19.” (10 septiembre 2021)
El motivo declarado de esta visita de tan alto nivel del 7 al 9 de septiembre de 2021, fue la invitación del Sr. Arzobispo de Santiago de Cuba para celebrar la Fiesta de la Virgen de la Caridad, Patrona de Cuba, en su Basílica-Santuario de El Cobre. El purpurado también visitaría las Catedrales de Santiago de Cuba y de La Habana, y pernoctó en la Nunciatura Apostólica (Embajada de la Santa Sede) en la Capital. El Cardenal se encontró con varios Obispos cubanos entre los cuales estuvo Mons. Emilio Aranguren, Obispo de Holguín y Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba. Acompañó al Cardenal, en los encuentros con las autoridades, el Nuncio Apostólico del Papa en Cuba, el Arzobispo Mons. Giampiero Gloder, lo que señala el carácter diplomático de esas reuniones. Los Obispos cubanos no participaron en ningún acto oficial, solo en los de carácter religioso.
Algunas personas, dentro y fuera de la Iglesia, han expresado su disgusto y decepción con esta visita y con expresiones de alabanza a la salud cubana y a los investigadores nacionales. Respeto estas opiniones que es normal que se sientan por lo menos por dos razones: la primera y principal es precisamente la crítica situación del sistema de salud cubano en medio de un pico de la pandemia. La otra es que después del 11J el país ha cambiado sin retorno y todo gesto está marcado por esa crisis y demanda de libertad que supera a la de la COVID.
- Hits: 2986