Pinar del Río, Ago.2.─ A pesar del fuerte operativo montado por la Policía Política, el 7 de julio de 2012, 52 miembros de La Alianza Democrática Pinareña se reunieron en la vivienda de la activista Alicia Paino Viera, en el Reparto Pedro Tey de la ciudad de Pinar del Río, en la Provincia más occidental de Cuba, para participar en una clase de Derecho Constitucional impartida por el Licenciado Raúl Luis Risco Pérez en la que se estableció un paralelo entre la Constitución de 1940 y la actual Constitución Castro-Comunista. En la concurrida actividad se despidió a los opositores Conrado Rodríguez Suarez y María Cecilia Ramos Morejón.
Human Rights Watch (HRW) señala que la concentración de poder del presidente Hugo Chávez provoca un serio perjuicio a los derechos humanos en Venezuela. En su reciente informe Concentración y Abuso de Poder en la Venezuela de Chávez, de julio del 2012 ,HRW documenta cómo la acumulación de poder en el Ejecutivo y el deterioro de las garantías de derechos humanos le permiten al gobierno de Chávez intimidar, censurar e iniciar acciones penales contra los críticos de su gestión y contra los que considera opositores en una variedad de casos vinculados con el poder judicial, los medios de comunicación y la sociedad civil.
El Director para las Américas de HWR, José Miguel Vivanco, indicó que “Durante años, el Presidente Chávez y sus partidarios han venido construyendo un sistema que le da vía libre al gobierno para amenazar y castigar a los venezolanos que interfieran en su agenda política. Hoy en día, el sistema se encuentra firmemente en pie, y los riesgos que enfrentan jueces, periodistas y defensores de derechos humanos nunca han sido tan serios desde que asumió Chávez.”
El i anterior informe de HRW sobre Venezuela, de septiembre de 2008, documentó cómo eran afectadas las instituciones democráticas y las garantías de derechos humanos durante la primera década de presidencia de Chávez. Desde entonces, la situación de los derechos humanos en Venezuela se ha tornado aún más precaria. A pesar de que muchos venezolanos continúan criticando al gobierno, la idea de enfrentar represalias similares —mediante acciones estatales arbitrarias o abusivas— ha socavado la capacidad de los jueces de decidir con independencia casos políticamente sensibles, y obliga a periodistas y defensores a medir las consecuencias de publicar información y opiniones críticas del gobierno.
Bruselas, Jul. 12 (DP.net).─ Más de una veintena de dignatarios de diferentes religiones se han citado este jueves en Bruselas bajo el lema 'La solidaridad intergeneracional: hacia un marco para la sociedad del mañana en Europa'. Abordaron con los líderes de la UE y con espíritu aperturista algunos de los grandes desafíos del continente, como la crisis económica y los retos demográficos.
La Unión Europea emitió un Comunicado de Prensa sobre esta reunión de la Comisión, el Parlamento y el Consejo Europeo con los líderes religiosos "para debatir sobre la solidaridad entre las generaciones y los retos demográficos" en Europa.
El Comunicado, de fecha 12 de julio, dice lo siguiente:
Más de veinte altos representantes de las religiones cristiana, judía y musulmana y de las comunidades hinduísta y Bahá'í de toda Europa se han reunido hoy en Bruselas bajo el lema «Solidaridad intergeneracional: parámetros para la sociedad europea del mañana». Esta reunión de alto nivel fue convocada por José Manuel Barroso, Presidente de la Comisión Europea, y copresidida por Herman Van Rompuy, Presidente del Consejo Europeo, y László Surján, Vicepresidente del Parlamento Europeo en representación del Presidente de la misma institución, Martin Schulz. Con espíritu sincero y abierto, los líderes debatieron de la solidaridad intergeneracional y otros importantes retos demográficos para Europa, al igual que de la lucha contra el desempleo, el fomento de la prolongación de la vida activa y la conciliación entre vida profesional y vida privada. El Presidente Barroso animó a los líderes religiosos a que participen en el debate público y muestren las contribuciones concretas que las iglesias y las comunidades religiosas pueden hacer para explicar la necesidad de solidaridad.