El Centro de Estudios Convivencia hace explícita en sus páginas de la WEB (www.convivenciacuba.es) la orientación de un proyecto que fue creado con el propósito de fomentar un pensamiento plural y de promover propuestas pacíficas para facilitar la inclusión, la participación ciudadana, la ibertad de expresión, la justicia social y la democracia en el presente y el futuro de Cuba.
Entre sus propósitos, expresan claramente que: "Este objetivo debe acercarnos a la visión que tenemos de la Cuba por venir: Que seamos una Nación libre y próspera, en la que sanemos el daño antropológico causado por el totalitarismo, alcancemos una educación para la libertad y la responsabilidad que supere nuestro analfabetismo ético y cívico, al mismo tiempo que ayudemos a tejer una convivencia fraterna y laboriosa que nos permita reconstruir el multicolor entramado de la sociedad civil cubana.
Este Centro cultural y cívico que se sostiene gracias a un voluntariado de ciudadanos conscientes, se ve hostigado con demasiada frecuencia por las autoridades cubanas."
En un último comunicado, informan al mundo sobre otros hechos recientes que los afectan y entorpecen su enaltecedora misión:
Pinar del Río, Sept.23.─ "En la noche del 22 de septiembre, alrededor de las 8, recibimos la llamada de Tania de la Caridad Reyes y su esposo, Yosvany Alfonso, del Proyecto Nueva Esperanza, de Cienfuegos, para comunicarnos que habían sido detenidos al llegar a la terminal de ómnibus de Pinar del Río, con el propósito de participar en el curso que ofrece el Centro de Estudios Convivencia, los días 23 y 24 de septiembre, llamado “Mi barrio una comunidad”.
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my support. She is still disabled and has limited mobility. (For those who need a reminder, click on link below to go to my posts published in the PARTICIPATORY FORUM ─ the one about her is called a "
Beijing, Aug.30.- Huang Yanlai was 74 when he first raped 11-year-old Xiao Yu. He threatened her with a bamboo-harvesting knife while she was out gathering snails in the fields for her grandmother in Nan village, Guangxi province, in China’s south-west. Over the following two years, Xiao Yu (a nickname meaning Light Rain) was raped more than 50 times, her hands tied and a cloth stuffed in her mouth. She was a left-behind child, entrusted to relatives while her parents worked in distant cities. Her father returned home once a year. Told that his daughter was in trouble, he asked her what was wrong but she was too frightened to tell him. So he beat her up.