Perspectivas / Perspectives

Participatory Democracy Cultural Initiative (PDCI) and its subsidiary in the WEB, DemocraciaParticipativa.net wholeheartedly congratulates Dr. Denis Mukwege, one of the two winners of the 2018 Nobel Peace Prize, which he received jointly with Iraqi Yazidi activist Nadia Murad, both of whom are leading campaigners against rape as a weapon of war.

Dr. Mukwege is a courageous gynecologist and founder of the Panzi Hospital in the Democratic Republic of Congo (DRC), where he made it his mission to treat the horrific injuries suffered by thousands of women who were victims of violent rape by the combatants in the protracted and brutal war in Eastern Congo.

In 2014 Dr. Mukwege obtained a grant to help him fund a documentary about his initiatives and work: “The Man who Mends Women,” was an award-winning film by director Thierry Michele and Collette Brackeman, co-produced by Les Films de la Passarelle and Ryva Productions. Screened throughout Congo and internationally, including the United Nations, the House of Commons, and the European Parliament, the film raised awareness of atrocities committed by the Congolese army and armed groups against women in Eastern Congo and highlighted Dr. Mukwege’s achievements through his heroic work to empower victims of sexual violence.

La Oficina de la Alta Comisionada detalló las violaciones perpetradas entre julio de 2015 y marzo de 2017 con un saldo de, por lo menos, 505 muertos a manos de las fuerzas de seguridad hasta entonces.

Ginebra, Oct.2.– Después de reiteradas gestiones ante el Consejo de Derechos Humanos (OHCHR) por parte de diveras organizaciones defensoras de los derechos y libertades de los venezolanos, para lograr la intervención activa de la OHCHR en la tragedia que abate a Venezuela y que se agrava por momentos, el Consejo aprobó una notable resolución sobre la situación en Venezuela, en la que expresa su preocupación por las "graves violaciones de los Derechos Humanos" que se están registrando en el país y reclama al Gobierno de Nicolás Maduro que acepte ayuda humanitaria internacional. Estas gestiones lograron su objetivo tras el espaldarazo del "Grupo de Lima"**, que fue el que logró introducir el caso de Venezuela en la agenda del Consejo.

Tras reconocer que cientos de miles de venezolanos "se han visto forzados a abandonar su país" como resultado de la situación que "afecta seriamente sus Derechos Humanos", el Consejo ha pedido al Ejecutivo que "acepte ayuda humanitaria para abordar la escasez de alimentos, medicinas y suministros médicos, el aumento de la desnutrición, especialmente entre los niños, y el brote de enfermedades que habían sido anteriormente erradicadas o mantenidas bajo control en América Latina".

Since February 2009, 94 Tibetans have self-immolated in Tibet as reported up to March this year, with a dramatic acceleration in frequency since the once-in-a-decade leadership transition at the Chinese Communist Party Congress in November.

 The Chinese authorities in Tibet have intensified measures to prevent information reaching the outside world about the self-immolations. This has been combined with a more aggressive and formalized response to the self-immolations, involving harsh sentencing and torture for those suspected of involvement, even if that is simply bearing witness. Due to this climate, it is impossible for this list to be fully comprehensive, and it is indicated on the list where circumstances of the self-immolations are not fully known.

A map marking the locations of the self-immolations in Tibet can be viewed HERE. For further information and details of the lives of a number of those who self-immolated and the statements they left behind. (ICT report, Storm in the Grasslands: Self-immolations in Tibet and Chinese policy).

por Eduardo Fernández Luiña *   

La Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) ha sido desde sus orígenes, allá por el 2007, un organismo polémico, capaz de despertar el interés investigador de especialistas en la lucha contra la corrupción fuera y dentro del citado país centroamericano.

El pasado 1 de septiembre, el presidente Jimmy Morales señaló en un comunicado problemático y plagado de incertidumbres que la CICIG finalizaría su mandato en el año 2019. Todo porque el Estado de Guatemala ya no desea prorrogar su misión en el país durante dos años más. A día de hoy y si todo sigue igual, la CICIG finalizará su mandato después de diez años de bagaje y cinco prórrogas. Todas solicitadas, como señala el documento que da origen al organismo, por el Gobierno de Guatemala.

La decisión de Morales disfruta de validez jurídica. Obviamente, parece lógico que el presidente, la cabeza del poder ejecutivo de un Estado, pueda romper cuando considere necesario y con base en el acuerdo firmado un compromiso de naturaleza internacional. En política internacional parece evidente que el opting out es (y debe seguir siendo) una opción.