Vuelven a arrestar a joven cristiana del Sudán un día después de su liberación

Publicamos hace pocas horas la buena noticia del éxito de la campaña [ver AQUÍ], a la cual contribuimos, para salvar a Mariam Yahya Ibrahim de la muerte
Su nueva detención es un duro golpe en la defensa de los derechos humanos

Nairobi, Jun.24 (DP.net).─ La mujer que había sido condenada a muerte en Sudán por el "grave" delito de haber contraído matrimonio con un cristiano y haber cometido apostasía, había sido liberada ayer lunes por un tribunal que, cediendo a la presión internacional y a las campañas de los defensores de los derechos humanos, dictaminó que Mariam nunca había sido musulmana y, por lo tanto, no había cometido el delito de apostasía.  Mariam con su esposo el día que contrajeron nupcias

No obstante, en la tarde de este martes ha sido detenida nuevamente en Jartum junto con su familia cuando se hallaban en el aeropuerto disponiéndose a abandonar el país. La urgente nota de alerta ha sido emitido por la Iniciativa Estratégica para la Mujer en el Cuerno de África (SIHA).

Mariam, de 27 años, había sido condenada a muerte por "convertirse" al cristianismo y abandonar el Islam, pero un tribunal de apelación de Jartum finalmente decidió atender, bajo presión internacional, las alegaciones de sus abogados y ordenó el lunes su excarcelación tras pasar más de cinco meses en prisión.

Las autoridades no han revelado el motivo de su nuevo arresto y tanto Mariam como su marido y sus dos hijos estarían retenidos en un edificio en los aledaños del aeropuerto de la capital sudanesa.

El calvario de esta mujer comenzó cuando un familiar la denunció como apóstata por haberse casado con un cristiano. El tribunal entendió que Mariam había cometido apostasía, es decir, había renunciado a la fe musulmana, y por ello la condenó a morir en la horca. Además, como su matrimonio era inválido a ojos de la sharia o ley islámica aplicada en Sudán, también fue condenada a 100 latigazos por cometer adulterio.

Algunas figuras de la reprimida oposición política en Sudán, han criticado en diversas ocasiones la sentencia contra Mariam y la han tachado de "escándalo, extremismo y retroceso intelectual" porque consideran que el Islam no contempla un castigo para la apostasía.

La divulgación de esta barbaridad jurídica y del abuso de las autoridades sudanesas en esta renovada detención es un elemento de protección que puede salvar a esa familia debido a la indignación que estas acciones producen a nivel internacional.

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