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El pasado 30 de diciembre, después que el Banco Central de Venezuela (BCV), publicará un informe sobre la economía nacional que había evadido por meses y que parece más bien un panfleto de arenga y apoyo político, el presidente Nicolás Maduro, anunció que tomará medidas para enfrentar la difícil situación de recesión, con creciente inflación y desabastecimiento. Maduro culpó a la oposición y a la baja de precios del petróleo, que atribuyó a la manipulación estadounidense, y aseguró, una vez más, que adoptará medidas para superarla aunque, como de costumbre, no las especificó.
El informe del BCV muestra que Venezuela está técnicamente en recesión, con reducciones consecutivas del PIB durante los tres primeros trimestres de 2014. Los sectores de la construcción, manufactura y comercio (y servicios de reparación) se contrajeron en 10%, 9,2% y 10,7%, respectivamente entre enero y setiembre de 2014 en relación con igual periodo de 2013. Los servicios prestados por el gobierno aumentaron en todos los tres trimestres de 2014 y tuvieron un aumento del 1,7% entre enero y setiembre de 2014 en relación con el mismo periodo del 2013. A partir del 2do trimestre de 2013 la tasa de crecimiento del PIB comenzó a disminuir consistentemente y muestra una contracción del 4% en los tres primeros trimestres de 2014 en relación con los tres primeros de 2013.
Es notorio y resulta contradictorio que la tasa de desempleo se redujera de 6,6% en noviembre de 2013 a 5,9% en noviembre de 2014 y que la tasa de desempleo juvenil (15 a 24 años) disminuyera de 16,6% a 14,1% en igual periodo. En enero de 2015 el gobierno adoptó una medida de inmovilidad laboral para este año.
La tasa de inflación acumulada hasta noviembre de 2014 fue de 60,1% y anualizada (noviembre 2013 a noviembre 2014) de 63,6%. Los rubros que más aumentaron durante el último año fueron: alimentos y bebidas no alcohólicas 92,9%, bebidas alcohólicas y tabaco 85,7%, restaurantes y hoteles 75,4%, transporte 55,1% y servicios de educación 58,9%.
El Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM) estimó que el costo de la Canasta Alimentaria Familiar (CAF) de noviembre de 2014, aumentó durante el último año en 98,1%, al pasar de Bs7.978,46 a Bs15.809,06. Cendas estimó que el índice de escasez su ubicó en 25,9% en noviembre de 2014.
El precio del barril de petróleo venezolano descendió continuamente desde US$92,58 el 5 de setiembre de 2014 a US$46,97 el 30 de diciembre, o sea, en 49,3%. En lo que va de 2015 ha continuado disminuyendo.
Actualmente existen fundadas dudas sobre la capacidad de Venezuela para servir su deuda externa como lo muestra el precio de los swaps de incumplimiento crediticio. Fitch disminuyó la clasificación crediticia venezolana de B a CCC. Existe una creciente expectativa que Venezuela renegociará la deuda pública externa dado su bajo nivel de reservas internacionales. Venezuela vendió la deuda petrolera que República Dominicana había contraído a un 59% de su valor y la deuda externa de Venezuela que vence en 2027 se vende a 38 centavos de dólar. El viaje a China de Maduro con cinco miembros de su gabinete ha acentuado las especulaciones.
Perspectivas para 2015
Es correcto que Maduro señalara los efectos económicos adversos de la intranquilidad política de Venezuela en febrero-marzo de 2014 y la caída de precios del petróleo desde setiembre. Este último es un fuerte shock externo cuyos efectos se espera perdurarán en 2015. Los pronósticos estiman un techo del precio de petróleo de alrededor de US$60 para el próximo trienio.
Maduro, sin embargo, ignoró cinco aspectos fundamentales que tienen a la economía muy afectada y que la mantendrán deprimida con elevada inflación en un periodo de evidente abundancia petrolera global debido a la expansión de la producción mundial y la reducción del aumento de la demanda asociada a una menor expansión crecimiento de la economía global.
(1) Un sistema político no inclusivo, intransigente y dogmático a pesar de los fracasos de desperdiciar la bonanza petrolera y el creciente el endeudamiento externo que carece de la crítica política y económica independiente para hacer las correcciones imprescindibles. Una muestra de esto último es el politizado y obsecuente Informe del BCV del 30 de diciembre.
(2) La colectivización de los medios de producción convertidos en empresas estatales manejadas por personal inepto y con nóminas infladas que en vez de proporcionar recursos al estado lo demandan y son financiados con préstamos del BCV, agravando el ya elevado déficit fiscal y elevando las presiones inflacionarias.
(3) La política de controles administrativos de precios, cambio, monetarios, etc. y el debilitamiento de las instituciones básicas que impiden que las fuerzas de mercado funcionen y tengan la flexibilidad para hacer los ajustes necesarios y mantengan la eficiencia. Además, las políticas se aplican arbitrariamente para favorecer a intereses y grupos afines al gobierno lo que crea un ambiente generalizado de corrupción.
(4) Una política fiscal deficitaria que mantiene el déficit público total en niveles cercanos al 20% del PIB y es financiado mayormente con emisión monetaria y préstamos externos que desata presiones sobre los niveles inflacionarios y la estabilidad externa.
(5) La política de dar ayuda externa en condiciones precarias, vendiendo petróleo subsidiado a Cuba y otros países.
Observación final
Venezuela no solo ha imitado a Cuba en la implantación de un sistema socialista inoperante (con la pretensión de que es un socialismo del siglo XXI, pero que en realidad es más semejante al soviético) sino también en su inmovilismo y renuencia para hacer las correcciones imprescindibles y eliminar las mayores distorsiones y desbalances existentes en una situación que se ha tornado cada vez complicada. Se fija más en los riesgos que pueden tener las medidas correctivas que en los beneficios que traerían. El gobierno ha olvidado cpmpletamente la meta de lograr el desarrollo económico.