Anuncian también el establecimiento de una zona económica y compromisos medioambientales ante la realidad de una Unión Europea que está fragmentada y dividida. Este Tratado firmado recientemente por Francia y Alemania supone un nuevo paso en las relaciones bilaterales, pero no debería trasladar la imagen de duunvirato: el acuerdo representa un punto de encuentro insuficiente para desarrollar el proyecto europeo.
Claves de un nuevo Tratado franco-alemán en Aquisgrán
Aquisgrán, Ene.22.– Francia aspira a conservar su capacidad autónoma de actuación, mientras que la prioridad alemana es mantener el statu quo y la cohesión de la Unión, y preservar el papel de Europa en la OTAN.
El Tratado de Aquisgrán ocupa 16 páginas en su versión alemana, que contiene 28 artículos. Más allá del marcado carácter simbólico del acuerdo, el texto contempla objetivos y medidas concretas. Estos son los principales puntos del acuerdo franco-alemán firmado el martes en Aquisgrán:
- Unión Europea. Aparece en el primer capítulo, en el que se dice que “los dos Estados profundizarán su cooperación en política europea”. Defenderán además una “política exterior y de seguridad común eficaz y fuerte y reforzarán y profundizarán la unión económica y monetaria”. Promoverán “la convergencia económica, fiscal y social”.
- Paz, seguridad y desarrollo. La cooperación en política exterior, de defensa y seguridad común y de desarrollo tendrá como fin “reforzar la capacidad de acción autónoma de Europa”. Ambos países se prestarán “ayuda y asistencia por todos los medios disponibles, incluida la fuerza armada, en caso de agresión contra uno de sus territorios”. Se comprometen también a “reforzar la capacidad de acción de Europa y a invertir conjuntamente”. Las fuerzas armadas de ambos países cooperarán con el fin de “instaurar una cultura común y de efectuar despliegues conjuntos”. Habrá además posiciones comunes en materia de exportación de armas ...
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