Jerusalén. Enero 16 (DPnet).– Según las últimas noticias, todo indica que HAMAS puede haber echado por la borda el acuerdo de cese al fuego en Gaza al proclamar su "orgullo" por la matanza y toma de rehenes del 7 de octubre de 2023.
Al anunciarse el alto el fuego, el líder de Hamas, Khalil al-Hayya, que vive en Qatar, expresó su "orgullo" por la horrible masacre del 7 de octubre en la que Hamas masacró a más de 1200 personas en Israel. Además, insinuó su intención de repetirla.
Al-Hayya dijo que el ataque "siempre será una fuente de orgullo para nuestro pueblo". Y agregó que: "Nuestro pueblo ha frustrado los objetivos declarados y ocultos de la ocupación. Hoy demostramos que la ocupación nunca derrotará a nuestro pueblo y su resistencia. Nuestro pueblo expulsará a la ocupación de nuestras tierras y de Jerusalén lo antes posible". Nótese que "la ocupación" no se refiere a Gaza sino a todo el territorio del Estado de Israel.
En el mortífero ataque del 7 de octubre contra Israel participaron cinco grupos armados palestinos con Hamás después de entrenarse juntos en ejercicios de estilo militar a partir de 2020. Los grupos llevaron a cabo simulacros conjuntos en Gaza que se asemejaron mucho a las tácticas utilizadas durante el asalto mortal, incluso en un sitio a menos de 1 km (0,6 millas) de la barrera con Israel. Estas actividades de adiestramiento fueron publicadas en las redes sociales para atraer más reclutas. Durante estos ejercicios, practicaron la toma de rehenes, el asalto a complejos y la penetración de las defensas de Israel.
Una evaluación de los servicios de inteligencia de Estados Unidos reveló que Hamás ha sustituido con nuevos reclutas a casi todos los terroristas que han muerto en los enfrentamientos con Israel. Además, el grupo terrorista sigue teniendo el control indirecto de grandes franjas de Gaza debido a la falta de cualquier mecanismo policial o de gobernanza en Gaza, ya que Israel no ha establecido una administración provisional ni ha permitido que la Autoridad Palestina (AP) se haga cargo de las zonas liberadas de Hamás.
A pesar de ser el principal negociador de Hamas en el alto el fuego y las conversaciones sobre los rehenes, al-Hayya dijo que su demanda por poner fin a la guerra, no implica que el grupo desista de seguir buscando la destrucción de Israel, mirando hacia Jerusalén y la mezquita de Al-Aqsa como una "brújula" que los guíe a sus objetivos.