¿Puede calcularse la fecha del nacimiento de Jesús de Nazaret?

Todas las Tradiciones tienen una base histórica. No debemos confundir "Tradición" con "Leyenda". La "Tradición" tiene un origen real, mientras que la "Leyenda" es producto de la imaginación. La celebración de la Navidad el 25 de diciembre descansa en la Tradición y, por tanto, el nacimiento de Jesús, a quien un tercio de la humanidad reconoce como el Mesías, Hijo de Dios, se conmemora en una fecha que tiene mucho sentido histórico.

Es cierto que la Iglesia Católica y el resto del Cristianismo posterior han fijado específicamente la fecha del 25 de diciembre para conmemorar el nacimiento del Salvador, como una forma discreta y eficaz de reemplazar la fiesta pagana del Sol Invictus. Esta decisión la tomó el Papa Liberio en el siglo IV para cristianizar esas fiestas sin antagonizar con la población acostumbrada a esos festejos. 

En realidad, la Iglesia no celebra una fecha en particular sino un hecho. Y aunque la Biblia no es un libro de historia ni tampoco un compendio de biografías, sitúa los hechos dentro del contexto histórico de los acontecimientos, circunstancias y costumbres de la época. Por consiguiente, podemos afirmar que es también cierto que la elección de la fecha se ajusta a la Tradición y a los hechos que podemos interpolar de lo que nos dicen los textos sagrados, según los cuales Jesús, efectivamente, nació en alguna fecha al comienzo del invierno, la cual pudo ser el 25 o cualquiera de esos días de fines de diciembre hace poco más de 20 siglos.

Hagamos cálculos según lo que encontramos en las Escrituras:

Zacarías era el esposo de Isabel, madre del que sería conocido como Juan el Bautista. Era un sacerdote judío que, según las normas de su religión, estaba autorizado para entrar en el recinto del Templo de Jerusalén conocido como "Santo Santísimo" ("Sanctasantórum"). Esto sólo podía hacerlo una vez al año en Yom Kippur ("Día de la Expiación”), una fecha que siempre cae a finales de septiembre, según el calendario actual. Por tanto, entró, como era su función sacerdotal, y según San Lucas se le apareció el Arcángel Gabriel y le dijo: «No temas, Zacarías, porque tu petición ha sido escuchada; Isabel, tu mujer, te dará a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Juan» (Lc 1; 5-25). Este aviso asombró a Zacarías porque su mujer era considerada estéril y durante muchos años no había podido tener hijos.
 
La segunda Anunciación del Arcángel Gabriel fue a María (Lc 1, 26-38), cuando le dijo> «Mira, concebirás y darás a luz un hijo, a quien llamarás Jesús» y la futura madre de Jesús corrió poco después del asombroso aviso a darle la portentosa noticia a su prima Isabel (Lc 1, 39-45).

Cuando María visitó a Isabel, ésta tenía 6 meses de embarazo. Por tanto, desde la Anunciación a Zacarías a fines de septiembre, la visita de María seis meses después ocurrió a fines de marzo. Es fácil hacer el cálculo por el cual María daría a luz 9 meses después a fines de diciembre.
¡Feliz Navidad!

TODOS LOS EVENTOS HUMANOS SON CALCULABLES. EL HECHO REAL ES DEMOSTRABLE SI LOS MEDIOS USADOS SON CORRECTOS Y EXACTOS. PEDRO