De la globalización neoliberal.

De la globalización neoliberal

-Hoy cuando de nuevo afloran en varios países de la región dichas tendencias político/económicas, vale recordar ciertos antecedentes y conceptos teóricos expresados, que como ideas y experiencias se acumularon en el área.

-Décadas atrás cuando se promovió la política de globalización neoliberal, en ese entonces y bajo la intención y entusiasmo de sus patrocinadores, se expresaron argumentos qué por su naturaleza subjetiva e unilateral; chocaron con las realidades económicas y sociales en Latinoamérica y el Caribe, impidiendo se convalidaran.
No obstante, no han dejado de insistir se en ellas.

-Decir como se hizo a fines del pasado siglo, que la integración en el área se encontraba en marcha a través de la acción e influencia de las empresas transnacionales y la globalización neoliberal; resultó para muchos un criterio no solo exagerado sino falso.

-Tal “integración” intentó explicarse a partir de las ideas y prácticas neoliberales y la activa acción e interrelación con las empresas transnacionales; considerando qué al relacionarse con estas, competir en el mercado mundial y asumir el progreso tecnológico y la modernidad; tales elementos serían esenciales para propiciar un futuro mejor en la región.

-Con las ideas promovidas en teoría y práctica, económicas y comerciales, se concebían por las megaempresas transnacionales, la forma de inserción mundial de las economías de Latinoamérica y del Caribe, tan dependientes como han sido del mercado mundial. -

-Sin embargo, la vulnerabilidad de dichas ideas estuvo, en que cuestiones éticas y sensibles como la pobreza, desigualdad o la exclusión social; quedaron a la expectativa y sin consideración sobre los supuestos beneficios de dicha “integración”. Concentrándose solo en los beneficios de alcanzar progresos técnicos e innovación productiva. Según la concepción neoliberal globalizadora, América Latina y el Caribe habrían de renunciar a su proyecto de desarrollo e identidad cultural, ya que serían arrastrados por las transformaciones que venían ocurriendo en el capitalismo contemporáneo.

-Una interpretación de la realidad que eliminaba las referencias a la explotación, las injusticias sociales y la desigualdad económica; eliminando del ámbito del pensar intelectual, la crítica sobre esas lacerantes realidades contemporáneas, secuestrando la voluntad política por el principio de acatamiento a las leyes del mercado.
Para muchos significó la necesidad de cuestionar, los beneficios de una modernidad carente de contenido histórico, ético y moral.

-Se hizo aparentar que el capitalismo se modificaba o había agotado, concluyendo un ciclo histórico y no faltaron los que expresaron se estaba a las puertas de una nueva época, donde se originaba un novedoso o posterior capitalismo.

-El tiempo y las realidades contemporáneas se encargarían de corregir aquellas ideas peregrinas, lanzadas festinadamente y que analizadas desde los hechos que luego ocurrieron; es posible afirmar, mostraran más deseos o intereses de las naciones poderosas y sus entidades empresariales, que realidades de apoyar y beneficiar con políticas económicas y comerciales a los países de la región.

-También se desplegó una amplia divulgación sobre las ventajas de las prácticas neoliberales, no faltaron profesionales de la economía que las fundamentaron para apuntalarlas conceptualmente, pero sus enfoques fueron por lo general economicistas y desdeñaban los posibles impactos sociales.
Al restarle integralidad a su fundamentación, debilitaron sus argumentos y perdieron credibilidad científica; impidiendo luego estos lograran avalarse, al menos en América Latina y el Caribe.

-En realidad se diseñó e implementó una política, que mayormente sirvió a los intereses de las poderosas empresas transnacionales; representativas como se conoce, de los grandes y poderosos sectores económicos y financieros mundiales.

-Luego vino la divulgación y con ellas las manipulaciones.
En no pocos aspectos se hizo a partir de una retórica político/económica superficial e inconsistente, más de consignas, que portadora de un análisis científico.
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-Después de haberse impuesto la globalización neoliberal en la región, los hechos, la situación real con sus resultados y terquedades, se encargarían de mostrar a quiénes beneficiaba y a quiénes no; poniendo al descubierto las apetencias de las grandes empresas transnacionales y las verdaderas consecuencias sobre las economías domésticas del área, junto a los corrosivos impactos sociales producidos.

-La globalización neoliberal se presentó como una nueva etapa histórica, donde el cuestionado carácter del capitalismo quedaba atrás y el presente de la globalización neoliberal, mostraría los beneficios económicos/sociales que surgirían.

-Las ideas promovidas por aquel entonces, no diferenciaron países y sociedades por sus niveles de desarrollo, subestimando desigualdades estructurales y desventajas históricas, con que muchas naciones se desenvolvían internacionalmente. -Obviaron qué en los últimos siglos los países menos desarrollados, habían sido sometidos a condiciones de intensa explotación del colonialismo y luego del neocolonialismo y que además debían atravesar, inevitablemente, por procesos de reacomodo económico e institucional para pretender vincularse a las políticas del liberalismo global.

-Sobre los proyectos transformadores de la globalización (“que aportarían ventajas sociales”), se consideró no debían enfrentarse políticamente; dado no tendría sentido acometer acciones anticapitalistas, contra una política qué a la larga se encargaría de solucionar las aspiraciones de justicia social en democracia.

-Se reafirmó la idea de las posibilidades del mercado para armonizar las diferencias sociales y propiciar desarrollo económico, insistiéndose en que tales aspiraciones económico/sociales estaban consideradas.
De ahí el criterio sustentado que lo consecuente sería asumir esas políticas, porque a la larga beneficiarían a todos.

-Pero para implementar sus políticas, era necesario realizar numerosas readecuaciones a las exigencias de la globalización del capitalismo; igual efectuar cambios en el quehacer del Estado, sobre todo en cuestiones que obligaban a (desarticular medidas sociales de carácter proteccionistas, que dijeron hacían perder racionalidad del mercado, o las prácticas de redistribución del ingreso, las inversiones públicas en los servicios sociales y acceder a las privatizaciones); dado que según los artífices neoliberales, estas, entre otras, eran culpables de todos los males que arrastraba la región. -

-Se expresó que los Estados nacionales languidecían y su papel e importancia resultaban cada vez menor; por lo que defender a ultranza posiciones nacionales o de soberanía, significaba pobre lucidez.

-No se inhibieron para decir, que las fuerzas progresistas e ideas socialistas en América Latina y el Caribe se habían debilitado, o fracasado definitivamente y su vigencia política era cosa del pasado. Luego en la época de la globalización neoliberal, insistir en tales posiciones serían solo deseos o utopías, condenadas de ante manos al fracaso.

-Manifestaron que los actores y/o promotores políticos (los intelectuales o líderes de la izquierda progresista), atravesaban por una irreversible bancarrota político/ideológica, encontrándose sin rumbo ni orientación (a partir del colapso de la URSS y países “socialistas” europeos), valorándolos como incompetentes ante las nuevas realidades del mundo y en especial las de América Latina y el Caribe y sin posibilidades de accionar con objetividad y acierto.

-Incluso algunos llegaron a manifestar, que el proceso de la globalización neoliberal había transformado las estructuras de clases sociales, siendo sustituidas por las novedosas formas de la acumulación del capital transnacional y el surgimiento de grupos establecidos en las megaempresas transnacionales o globales.

-Lo demostrado de acuerdo a la realidad acontecida fue otra, no existiendo elemento para valorar, que la globalización neoliberal se originaba y desarrollaba, con propósitos de apoyar a países rezagados y menos favorecer su crecimiento o desarrollo; menos auspiciar las transformaciones científico/tecnológicas de que se encuentran urgidos.

-Por lo que expresar que oponerse a la globalización es hacerlo al progreso, ocultaba la esencia de un orden internacional injusto, basado en abismales diferencias económicas y sociales; colocando en evidencia que tales criterios, no dejaban de ser falsos y como consecuencia impedían se asimilaran sus ideas.

-De acuerdo a los promotores del neoliberalismo, nos hallábamos en una época post/capitalista, orientada a buscar equilibrios económicos e igual sociales. Sin embargo, el neoliberalismo globalizado no se caracterizó por ser una panacea económica y mucho menos social. Caracterizándose por un mayor crecimiento de la concentración y centralización de los capitales a escala mundial, que reforzó la fase monopólica del capitalismo contemporáneo, a costa de impactar sobre intereses económicos nacionales y profundizar la crisis social en los países del área.

-De acuerdo con la filosofía de la globalización neoliberal, Latinoamérica y el Caribe deberían abrir plenamente sus economías al mercado, apartar el papel del Estado en tales menesteres y dar rienda suelta a las privatizaciones; de manera aspirar a obtener beneficios del progreso y la modernización económica.

-Precisamente ello hizo pensar a muchas gentes, que el liberalismo del siglo XIX o el neoliberalismo del XX, se afanaban en similares o parecidas ideas y probablemente en sugerir mismas “soluciones”; dando por resultado que amplios sectores ciudadanos no vieran con simpatía tales políticas.

-Por eso hoy cuando nuevamente en varios países de la región, resurgen esas políticas; no deben sus promotores insistir en sus desaciertos conocidos, so riesgos de volver a fracasar estrepitosamente