El Observatorio Cubano de Derechos Humanos, con sede en Madrid, España, apoya desde el exterior a numerosas personas que en Cuba monitorean las violaciones a los derechos humanos, asisten a los prisioneros políticos y a los presos de conciencia y ofrecen asistencia legal a quienes se ven hostigados o sus derechos son conculcados por las autoridades. Refiriéndose a sus funciones, señalan que sus objetivos están orientados "a que la sociedad civil cubana desempeñe un papel fundamental promocionando el espíritu de la democracia mediante la capacitación de los ciudadanos cubanos para fortalecer su activismo cívico y de los actores y ONGs que trabajan u orientan sus acciones con el mismo fin."
La Situación de los Derechos Sociales y la cruel represión que sufren los cubanos
Entre sus múltiples funciones, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) difunde y publica sistemáticamente aquellas violaciones que atentan contra los derechos fundamentales de los ciudadanos cubanos, su integridad y libertades dentro y fuera de Cuba, con el fin de sensibilizar a instituciones y a la sociedad civil en general para que se solidaricen con el respeto a los derechos y libertades en Cuba.
En esta intensa labor destaca su informe anual sobre "El Estado de los Derechos Sociales en Cuba". El V Informe sobre Derechos Sociales fue publicado en agosto de 2022 y presenta la situación imperante con una estricta y meticulosa metodología, al cual pueden acceder en ESTE ENLACE. En estos momentos están elaborando su VI informe sobre este tema.
En el V Informe publicado en 2022 señalan que: "como en los estudios anteriores, en especial el cuarto, realizado justo durante las manifestaciones del 11 y 12 de julio de 2021, se confirma el creciente deterioro de los derechos sociales en Cuba, producto en gran medida de crisis estructurales y acumuladas, y de la falta de voluntad política de las autoridades cubanas para hacer los cambios que el país necesita"
Ese V Informe revela un notable aumento entre los encuestados que consideran "la crisis alimentaria" y "la inflación" entre los problemas más agobiantes para la población. Revela también el problema del suministro de agua que no llegaba al 15% de los hogares del país y que más del 35% de la población califica la calidad del agua que le llega al resto de la población como "mala" o "muy mala". Esta situación se veía complicada por un notable empeoramiento de la situación sanitaria.
También reportaban los encuestados que los cortes de energía de entre 6 y 24 horas afectaron a un 62% de los hogares, mientras que otro 7% de los hogares padecieron cortes de más de 24 horas.
El Informe de 2022 abunda con gráficos y detalles en muchos otros aspectos del deterioro del escaso bienestar social que impera en el país. No obstante, las autoridades prefieren hostigar y perseguir a encuestados y encuestadores en lugar de atender debidamente los problemas que estos revelan. Sobre esto se expresó en una reciente entrevista televisiva Yaxis Cires Dib, Director de Estrategias del OCDH, afirmando que "aunque el régimen cubano mantiene intacto su aparato represivo estatal y jurídico, para responder a quien ejerce sus derechos humanos, está teniendo problemas para manejar administrativamente el país y enfrentar problemas como el aumento de la marginalidad o la delincuencia común".
Aunque el Informe de 2023 está todavía en el proceso de compilación y redacción, hemos recibido informes fidedignos de que la situación ha empeorado notablemente en el año en curso.
Frente a esta situación, Cires Dib declaró que están dirigiendo peticiones al Alto Representante de la Unión Europea para que apoye a los cubanos en los esfuerzos encaminados a "la derogación de aquellos artículos del Código Penal que persiguen el ejercicio de los derechos humanos y aquellos veinticuatro artículos que establecen la Pena de Muerte como sanción, por tanto, la visita, la evaluaremos en clave de resultados".
Además, la represión no se limita a los temas enfocados en los informes mencionados sino que es grave por la agresión constante y las limitaciones a la libertad religiosa en la Isla. En un informe que está todavía en elaboración, se revela que: "Un 68% de los entrevistados admiten que ellos o alguien que conocen y que profesa una religión ha sido acosado, reprimido, amenazado u obstaculizado por motivos relacionados con su fe, en alguna medida; más de la mitad (un 54%) conoce a muchas o algunas personas en esta situación."
En general, Cuba está atravesando un grave estado de miseria que se complica por la cruel represión contra quienes se atreven a protestar públicamente y a reclamar sus derechos.