Hasta ahora, los ucranianos siguen sosteniendo una contraofensiva exitosa en ambos frentes. 
Kiev, Ene.16 (DP.net).– A principios de diciembre de 2022, el presidente ruso, Vladimir Putin, anunció preparativos para un conflicto prolongado, asegurando que su país aprendería de sus operaciones militares anteriores y sentando las bases para una renovada ofensiva en Ucrania.
Putin está renovando su estrategia ante el fracaso repetido de las fuerzas rusas en los últimos diez meses en sus intentos por lograr sus principales objetivos operativos en Ucrania. Fueron incapaces de tomar y ocupar Kiev durante las primeras semana de la guerra y de apoderarse de todo el territorio de los óblasts1 de Donetsk y Lugansk, pese a los avances iniciales. Tampoco fueron capaces de contener la contraofensiva ucraniana de los últimos meses que logró recuperar una parte considerable de ese territorio y los expulsó de todo el frente norte. Además, perdieron el control de Kharkiv y fracasaron en su objetivo de conquistar la importante ciudad de Kherson.
El Kremlin planeó una campaña aérea y de misiles contra la infraestructura clave ucraniana dirigida por el general del ejército Sergey Surovikin, la cual se desarrolló con fuerza a fines de 2022 y principios de este año. La campaña no se limitó a esa táctica sino quel han golpeado cruelmente objetivos civiles, como hospitales, escuelas y edificios de apartamentos con el propósito de desmoralizar a la sociedad ucraniana. Por el contrario, sólo lograron consolidar el patriotismo y la voluntad de resistir de los ucranianos.
Las fuerzas rusas no han llevado a cabo operaciones ofensivas importantes y en su mayoría han mantenido posiciones defensivas desde la serie de contraofensivas ucranianas exitosas a partir del otoño de 2022. Fuentes de inteligencia informan que ante esta situación las unidades rusas se están reagrupando y entrenando en Bielorrusia y en Rusia, cerca de las fronteras norte y nordeste de Ucrania.
La inteligencia ucraniana informó recientemente que el Kremlin busca elevar el número de su personal militar a dos millones en una fecha no especificada (de aproximadamente 1,35 millones de efectivos a partir de septiembre de 2022), mientras que los funcionarios de inteligencia occidentales señalaron que el comando militar ruso está en "preparativos serios" para una posible segunda ola de movilización.
Se anticipa que las fuerzas rusas traten de llevar a cabo una gran ofensiva en el área del óblast de Lugansk. La captura completa de los óblasts de Donetsk y Lugansk sigue siendo el principal objetivo oficial de guerra del Kremlin y se encuentran entre los objetivos más alcanzables de Putin, dado que los óblasts de Donetsk y Luhansk son logísticamente los territorios más fáciles de capturar y conservar para Rusia.
Es poco probable que las fuerzas rusas lleven a cabo una ofensiva en el sur de Ucrania en Kherson o Zaporizhia. Rusia busca asegurar los óblasts de Donetsk y Lugansk, territorios que el gobierno ruso ha reclamado (ilegalmente) como territorio ruso, y evitar otra derrota significativa como la derrota en el óblast de Kharkiv o la retirada de la ciudad de Kherson. Además, las fuerzas rusas se están atrincherando para tratar de derrotar con éxito una contraofensiva ucraniana en el frente sur y privar a Ucrania de la iniciativa destruyendo una proporción significativa de sus fuerzas mecanizadas (que incluyen tanques ligeros).
Fuentes de inteligencia pronostican sobre una posible ofensiva rusa a través de la frontera norte de Ucrania en el invierno de 2023. El riesgo de una invasión rusa a Ucrania desde Bielorrusia es bajo, pero posible, mientras que el riesgo de participación directa bielorrusa se considera muy bajo.
Ucrania requiere un mayor y muy oportuno apoyo occidental que les permita prepararse adecuadamente para resistir en la primavera las renovadas ofensivas rusas en el frente oriental. Occidente debe hacerlo rápidamente, incluyendo el suministro de tanques pesados prometidos por el Reino Unido y Alemania. Si Ucrania puede rechazar las ofensivas rusas de la primavera, habrá mejores oportunidades de sentar a ambas partes en la mesa de negociaciones para poner fin a la guerra.
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1 Un óblast es un término de origen ruso que hace referencia a una demarcación administrativa equivalente a una región.