El apoyo de la UNRWA a HAMAS ha sido ignorado por la gran prensa mundial

UNRWA, por sus siglas en inglés, es el Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas, encargado de asistir a los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente, con la única función de bridarles ayuda humanitaria, servicios sociales, educación, y atención médica. Además, estaba encargada de otorgar préstamos a los refugiados para ayudarles a establecer negocios y generar ingresos, con el objetivo de aliviar la pobreza, y se le acusa de que parte de esos fondos han servido para fortalecer a HAMAS.

Poco se dice ni se ha dicho en los medios de prensa sobre la responsabilidad de Naciones Unidas, comenzando por el Secretario General Antonio Guterres, por la construcción de un enorme túnel con todo tipo de instalaciones, edificado por los terroristas de HAMAS, el cual partía de un lugar debajo del edificio de la UNRWA en Gaza hacia territorio israelí. Además, pese a las evidencias, el Comisionado de UNRWA, Philippe Lazzarini, negó cualquier conocimiento de un túnel bajo su sede en Gaza después que el túnel fue descubierto. Lazzarini señaló que mientras no había un "conflicto activo", la UNRWA inspeccionaba sus instalaciones por dentro cada trimestre y que la última inspección de sus instalaciones en Gaza no encontró nada sospechoso.

A pesar del tiempo que ha pasado desde que el túnel fue descubierto, no se han revelado debidamente los detalles sino que, por el contrario, la prensa e incluso el Secretario General de Naciones Unidas han acusado repetidamente a Israel de violar la inmunidad de ese organismo de Naciones Unidas.

La UNRWA contrataba personal local para sus operaciones y debía reportar a Naciones Unidas sobre su personal y operaciones. Según algunos militantes palestinos tomados prisioneros por Israel, en ese túnel estaban cautivos algunos de los rehenes israelíes. Durante el transcurso de la guerra, Israel acusó a 12 empleados de la UNRWA de asistir a los responsables de la masacre del 7 de octubre perpetrada por terroristas liderados por HAMAS, que mataron a sangre fría a más 1.200 personas y tomaron 253 rehenes en el ataque asesino. 

Cuando el ejército israelí lo descubrió, el túnel, que desembocaba en las instalaciones de UNRWA, tenía 700 metros de largo y 18 metros de profundidad, bifurcado en algunos puntos, y revelaba habitaciones laterales. Había una oficina con cajas fuertes de acero que habían sido abiertas y vaciadas. Había un baño de azulejos. Una gran cámara estaba llena de servidores informáticos, otra con baterías industriales. Al parecer, militantes de HAMAS habían evacuado cuando las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) descubrieron el túnel. Habían procedido a cortar preventivamente los cables de comunicaciones que, según mostraron las autoridades israelíes, atravesaban el suelo del sótano de la sede de la UNRWA y entraban a sus instalaciones.

El Secretario General Antonio Guterres no aceptó nunca responsabilidad por este hecho ni reconoció la participación de funcionarios de UNRWA en la asistencia y mantenimiento de ese túnel y, presumiblemente, también en su construcción. Por el contrario, el pasado 25 de septiembre el Comisionado Lazzarini expresó en una reunión plenaria de la Advisory Commission (ADCOM) su agradecimiento por «la abrumadora solidaridad de personas de todo el mundo con los refugiados de Palestina y la UNRWA.» Y añadió: «Es fundamental renovar el mandato de la Agencia para asistir y proteger a los refugiados de Palestina en espera de una solución justa y duradera a su difícil situación.» 

Esta negativa a aceptar responsabilidad está reflejada en las páginas de UNRWA en la WEB, donde publican que: «Durante los últimos 23 meses, el Gobierno de Israel ha realizado continuamente acusaciones infundadas contra la UNRWA y su neutralidad. Estas acusaciones han puesto en grave peligro la vida del personal de la UNRWA y han dañado la reputación de la Agencia.» Y añade en esa declaración que el Comisionado Lazzarini «ha solicitado que se ponga fin a la campaña de desinformación infundada contra el organismo

No cabe duda de que la trágica situación que padecen los civiles palestinos en Gaza merece compasión y una urgente asistencia, pero la UNRWA, bajo la dirección del Comisionado Lazzarini, no parece ser un organismo confiable sino que la asistencia al pueblo palestino debe quedar a cargo de la Cruz Roja y de otros organismos humanitarios.

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