La indispensable imparcialidad del sistema de justicia
- Gerardo E. Martínez-Solanas
- Topic Author
- Offline
- Moderator
- Posts: 821
- Thanks: 76
La indispensable imparcialidad del sistema de justicia
17 Jun 2023 18:59 - 17 Jun 2023 19:08
Cuando insistimos en nuestro deber de acatar los fallos de los tribunales, sobre todo cuando se trata de casos controversiales que se elevan hasta la Corte Suprema, en realidad estamos reaccionando por la experiencia que nos garantizaba la imparcialidad de los jueces hasta hace algún tiempo, al menos en Estados Unidos, sobre todo en cuestiones políticas o de moral.
Lamentablemente, estamos experimentando en Estados Unidos una nefasta politización del sistema judicial impregnado de ideologías sociales. Ahora se habla de si este o aquel juez fue nombrado durante el período presidencial o de mayoría en el Congreso de este o de aquel Partido Político, haciendo descansar las críticas a determinados fallos controversiales desde la perspectiva de unos u otros que favorecen una corriente política o cualquier otra.
Además de esta triste realidad, nos alarma comprobar cómo muchos jueces están efectivamente respondiendo a determinadas ideologías y no tanto a los hechos de cada caso.
Pongamos como ejemplo un caso referente al aborto.
Aparte de las convicciones religiosas de que la vida comienza en el momento mismo de la concepción, está comprobado que el niño por nacer está bastante formado, le late el corazón y reacciona defensivamente ante el dolor que le causa un aborto cuando se realiza después de transcurridas las primeras 6 semanas del embarazo.
Debido a estas consideraciones que son científicamente comprobables, el Estado de Iowa pasó una ley en 2018, conocida como "Heartbeat Law" que prohibía el aborto cuando se detectaban los latidos del corazón del niño no nato, aunque incluía algunas excepciones pertinentes. En otras palabras, limitaba la autorización de practicar abortos a las primeras seis semanas desde la concepción, salvo en aquellas excepciones estipuladas como "urgencia médica", "violación sexual", "incesto" o que el médico encontrara alguna anormalidad que considerara incompatible con la supervivencia del niño.
La industria del aborto es poderosa y, además, está respaldada por un porcentaje bastante alto de ciudadanos del país, sobre todo mujeres, que son muy activistas y lograron bloquear la ley en una Corte de Distrito de ese Estado con el alegato de que era inconstitucional porque contradecía leyes federales de protección del aborto.
El Gobernador Kim Reynolds pidió el año pasado a los tribunales que se reconsiderara la ley que había sido bloqueada para poder aplicar la prohibición de realizar abortos después de las primeras seis semanas de gestación. Por tanto, la cuestión era reconsiderar la validez científica del desarrollo del niño no nato y las excepciones estipuladas. El caso llegó a la Corte Suprema del Estado y el fallo con 3 jueces a favor y 3 en contra resultó (debido al empate) que se rechazara la solicitud del gobernador y, por tanto, la Hearbeat Law siguiera bloqueada en Iowa.
Sería correcto aceptar la decisión de la Corte Suprema como una señal de respeto debido a un Poder Judicial imparcial que sólo se guía por los hechos comprobables. El problema que nos coloca en una posición de desacato consiste en que uno de los jueces que votó en contra de la solicitud del Gobernador Reynolds, un juez asociado de la Corte Suprema de Iowa, Thomas Waterman, el cual increíblemente escribió una opinión bloqueando la Ley de Latidos del Corazón (Heartbeat Law) refiriéndose a los no nacidos como "basura colocada en un bote de basura para su recolección". Una flagrante muestra de reacción ideológica divorciada de la debida imparcialidad de la Corte a la hora de examinar los hechos.
Uno simplemente no tiene palabras para describir cómo alguien con pensamientos tan viles y vacíos es capaz de escalar hasta la cumbre de la profesión judicial en un Estado como Iowa. ¡O en cualquier otro Estado donde vemos decisiones sobre este y muchos otros temas en los que en el dictamen de la corte pesa más la proyección ideológica del juez!
El remedio para este tipo de desprecio absoluto por la imparcialidad judicial mostrado por los servidores públicos que nos juzgan y que deberían saber mejor lo que hacen y sus consecuencias, es recordarles cortésmente, pero con firmeza, que la verdadera justicia protege a los más vulnerables de la discriminación y la destrucción. Escribir cartas, Emails y mensajes de texto a las cortes politizadas expresándoles nuestra protesta por los fallos tan parcializados que están dictando en los últimos años. Además, el remedio para este tipo de comportamiento por parte de los jueces en Iowa y en otros lugares es que la legislatura estatal busque todas las vías posibles para que la voluntad mayoritaria del pueblo sea reconocida como mandato cuando respaldan determinadas normas de ética para que se conviertan en ley y para que, luego, probablemente busquen reformar el sistema judicial que aparentemente se ha quebrantado bajo la influencia de ideologías políticas y sociales.
La imparcialidad judicial está en juego y corremos un grave peligro de que se enquiste al servicio de los intereses políticos e ideológicos. Cuando esto sucede, estamos abriéndole paso al totalitarismo.
Lamentablemente, estamos experimentando en Estados Unidos una nefasta politización del sistema judicial impregnado de ideologías sociales. Ahora se habla de si este o aquel juez fue nombrado durante el período presidencial o de mayoría en el Congreso de este o de aquel Partido Político, haciendo descansar las críticas a determinados fallos controversiales desde la perspectiva de unos u otros que favorecen una corriente política o cualquier otra.
Además de esta triste realidad, nos alarma comprobar cómo muchos jueces están efectivamente respondiendo a determinadas ideologías y no tanto a los hechos de cada caso.
Pongamos como ejemplo un caso referente al aborto.
Aparte de las convicciones religiosas de que la vida comienza en el momento mismo de la concepción, está comprobado que el niño por nacer está bastante formado, le late el corazón y reacciona defensivamente ante el dolor que le causa un aborto cuando se realiza después de transcurridas las primeras 6 semanas del embarazo.
Debido a estas consideraciones que son científicamente comprobables, el Estado de Iowa pasó una ley en 2018, conocida como "Heartbeat Law" que prohibía el aborto cuando se detectaban los latidos del corazón del niño no nato, aunque incluía algunas excepciones pertinentes. En otras palabras, limitaba la autorización de practicar abortos a las primeras seis semanas desde la concepción, salvo en aquellas excepciones estipuladas como "urgencia médica", "violación sexual", "incesto" o que el médico encontrara alguna anormalidad que considerara incompatible con la supervivencia del niño.
La industria del aborto es poderosa y, además, está respaldada por un porcentaje bastante alto de ciudadanos del país, sobre todo mujeres, que son muy activistas y lograron bloquear la ley en una Corte de Distrito de ese Estado con el alegato de que era inconstitucional porque contradecía leyes federales de protección del aborto.
El Gobernador Kim Reynolds pidió el año pasado a los tribunales que se reconsiderara la ley que había sido bloqueada para poder aplicar la prohibición de realizar abortos después de las primeras seis semanas de gestación. Por tanto, la cuestión era reconsiderar la validez científica del desarrollo del niño no nato y las excepciones estipuladas. El caso llegó a la Corte Suprema del Estado y el fallo con 3 jueces a favor y 3 en contra resultó (debido al empate) que se rechazara la solicitud del gobernador y, por tanto, la Hearbeat Law siguiera bloqueada en Iowa.
Sería correcto aceptar la decisión de la Corte Suprema como una señal de respeto debido a un Poder Judicial imparcial que sólo se guía por los hechos comprobables. El problema que nos coloca en una posición de desacato consiste en que uno de los jueces que votó en contra de la solicitud del Gobernador Reynolds, un juez asociado de la Corte Suprema de Iowa, Thomas Waterman, el cual increíblemente escribió una opinión bloqueando la Ley de Latidos del Corazón (Heartbeat Law) refiriéndose a los no nacidos como "basura colocada en un bote de basura para su recolección". Una flagrante muestra de reacción ideológica divorciada de la debida imparcialidad de la Corte a la hora de examinar los hechos.
Uno simplemente no tiene palabras para describir cómo alguien con pensamientos tan viles y vacíos es capaz de escalar hasta la cumbre de la profesión judicial en un Estado como Iowa. ¡O en cualquier otro Estado donde vemos decisiones sobre este y muchos otros temas en los que en el dictamen de la corte pesa más la proyección ideológica del juez!
El remedio para este tipo de desprecio absoluto por la imparcialidad judicial mostrado por los servidores públicos que nos juzgan y que deberían saber mejor lo que hacen y sus consecuencias, es recordarles cortésmente, pero con firmeza, que la verdadera justicia protege a los más vulnerables de la discriminación y la destrucción. Escribir cartas, Emails y mensajes de texto a las cortes politizadas expresándoles nuestra protesta por los fallos tan parcializados que están dictando en los últimos años. Además, el remedio para este tipo de comportamiento por parte de los jueces en Iowa y en otros lugares es que la legislatura estatal busque todas las vías posibles para que la voluntad mayoritaria del pueblo sea reconocida como mandato cuando respaldan determinadas normas de ética para que se conviertan en ley y para que, luego, probablemente busquen reformar el sistema judicial que aparentemente se ha quebrantado bajo la influencia de ideologías políticas y sociales.
La imparcialidad judicial está en juego y corremos un grave peligro de que se enquiste al servicio de los intereses políticos e ideológicos. Cuando esto sucede, estamos abriéndole paso al totalitarismo.
Last edit: 17 Jun 2023 19:08 by Gerardo E. Martínez-Solanas.
The following user(s) said Thank You: Julio M. Shiling
Reply to Gerardo E. Martínez-Solanas
Moderators: Miguel Saludes, Abelardo Pérez García, Oílda del Castillo, Ricardo Puerta, Antonio Llaca, Efraín Infante, Pedro S. Campos, Héctor Caraballo
Time to create page: 0.365 seconds