Las descalificaciones, insultos y cargos graves hecho en forma irresponsable de algunos políticos o personas que creen tener la razón contra los contrarios en los medios de comunicación oral o escritos, están a la orden del día y si se trata de Internet, ahí las acusaciones sin justificación adecuada llegan a lo absurdo y lo ilegal. La libertad de expresión es un derecho humano que se realiza ampliamente en una democracia y que es a la vez la mayor ventaja de esta y su máxima debilidad, ya que en ella, los partidos políticos enemigos del gobierno de turno suelen lanzar acusaciones algunas veces justificadas, pero otras no, y esa libertad al ser ejercida sin control confunde a la población en especial a los jóvenes, sobre que en el gobierno hay una dictadura corrupta e irresponsable y a la cual hay que derrotar a como haya lugar, ya que la democracia y la libertad dependen de eso, pero sin plantear adecuadamente la forma en que piensan gobernar y corregir las fallas, que según ellos la democracia ha permitido.
Se ha confundido la palabra tolerancia, sobre la cual descansa la democracia y la paz que hemos mantenido por años en el país. La tolerancia, es el respeto a las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias a las propias, pero cuidado, ser tolerante no significa que pueden jugar con la honestidad y el honor de las personas o engañar al pueblo para lograr su apoyo. Las barbaridades que los oponentes de un partido político dicen del contrario y de las personas en el gobierno si es del caso, rebasa el nivel de la violencia verbal y somete a un juicio público injusto e incluso sin muchos argumentos de peso a mucha gente honesta, a la cual no se le han probado nada ilegal o inmoral, excepto la justificación de mentir en contra de él para que la mentira quede flotando en el ambiente. La censura no se aplica en la campaña política pues de inmediato se habla de represión y de suspensión de la libertad de expresión, aunque la demagogia de los gritos e insultos o el odio manifestado de diferentes maneras contra el “enemigo” ya no contra el contrario, rebasa limites de la tolerancia racional, con la cual en estas épocas se permiten esos desafueros, esos hostigamientos y esas intimidaciones. Con eso en Costa Rica se está logrando polarizar a la opinión pública, no sólo políticamente sino incluso socialmente y lamentablemente algunos sectores de la prensa se prestan a ello con mucha facilidad. Han desaparecido las ideas y programas y abundan los insultos y las discusiones apasionadas donde no impera la racionalidad, y ahora quién no es incondicional de un grupo político, no es un rival en ese campo, sino un enemigo en el área social.
Al decirle a una persona que difamaba a un ministro del gobierno por una acción que a mí no me parecía incorrecta o ilegal, que por que no lo acusaba en lugar de estarlo difamando y agrediendo por la prensa e Internet, me dijo, no, porque en este país, el gobierno y los juzgados son corruptos y no van a castigarlo, o sea, ya tienen organizada incluso, la justificación de sus actos como si solo ellos tuvieran la razón. Y por supuesto al preguntarle que tipo de gobierno desearía tener para un país como el nuestro, no responden. Las barbaridades que algunos públicamente dicen de nuestro Presidente llevaría en otras naciones a la cárcel a quienes así se expresan. Hay que acordarse de que el gobierno anterior era inoperante por un presidente débil e indeciso y un Poder Ejecutivo sin autoridad, el Dr. Arias le volvió a dar su lugar al cargo. Durante su gestión ha tenido errores y ha dejado de cumplir algunas metas, pero estos dos últimos años ha tenido que lidiar con una crisis económica mundial que afectó también al país. Pero como Presidente merece respeto, muchas de los políticos que lo insultan y le hacen cargos de corrupción tienen años de estar diciendo eso, ¿si tienen evidencias de eso, por qué no tienen el valor de acusarlo?
La propaganda llena de odio irracional que escuchamos y leemos diariamente en la prensa, la radio y la televisión e Internet, ha sustituido a las ideas y a los argumentos, al extremo que uno de los candidatos con gran ingenuidad dice que voten por él pues es el “menos malo”, y otro, dice sin sonrojarse en forma demagógica, que va a resolver todos los problemas existentes, algo que ni en los países muy desarrollados y llenos de todo tipo de recursos se atreven a ofrecer los políticos.
Decía hace poco el Periodista Raymundo Palacio de México, que aparte del narcotráfico, el odio y la violencia verbal en la política está causando un grave daño a esa nación, pues aquí estamos igual.
El ser humano es el único que posee autonomía de reflexión, decisión y acción; como tal, es responsable de sus actos y debe guiarse por la razón, prudencia, tolerancia y el respeto a los derechos de los demás y a no dejarse arrastrar por la pasión y el odio, que impide razonar adecuadamente. Debemos tratar de convencer al contrario político o a los indefinidos con buenos argumentos no de imponernos con falsos argumentos. Ya que eso es lo que está debilitando a nuestra imperfecta democracia, que es siempre perfectible y que esperamos ir mejorando día a día, estableciendo prioridades definidas en el área social, económica y cultural que nos ayuden a ascender a una mayor justicia para todos. Eso es lo que esperamos haga por Costa Rica el partido ganador de esta campaña política.
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