Migraciones y Legalidad

Las controversias que suscitan los controles de inmigración y sus leyes se basan en consideraciones humanitarias y en la justa inquietud de que puedan fomentar prácticas abusivas y discriminatorias. Esto se debe a que los países afectados se han fundado en los principios de la moral cristiana, que da primacía a la dignidad humana y sus derechos, según la creencia de que las personas, sea cual sea su ciudadanía o estatus, han sido “hechas a imagen y semejanza de Dios”, que es una forma de expresar un convencimiento de que toda persona merece respeto por su valor intrínseco. Además, esos valores morales promueven el amor al prójimo y la compasión y la misericordia por quienes están necesitados o en problemas. Por tanto, la dignidad de la persona es primordial en cualquier escala de valores en nuestra sociedad, lo que desemboca en un equilibrio entre el acatamiento y la aplicación de las leyes y la obligación de oponernos a las que son injustas o propician la violación de los derechos humanos.

Algunos califican de injusta la reciente ley migratoria aprobada en Arizona porque temen una solapada discriminación racial y abusos de autoridad. Los que la defienden afirman que la discriminación racial está estrictamente prohibida y que es indispensable la “sospecha razonable” para detener a alguien y pedirle identificación. De hecho, la Corte de Apelaciones del 9º Circuito en California, ha decidido que en un país con tantos inmigrantes y visitantes legales y ciudadanos de origen mexicano la apariencia racial no puede alegarse para hacerlo. La figura legal de “sospecha razonable” permite la aplicación de la ley según las circunstancias totales que provocan esa acción de conformidad con la interpretación de quienes están versados y adiestrados para ejercer autoridad. La policía británica aplica lo que llaman “detención y registro”, que les permite detener a alguien para buscar armas, drogas, propiedad robada y evidencia de actos terroristas y otros delitos, pero la Corte Europea de Derechos Humanos ha dictaminado que la legalidad del procedimiento depende de que exista una “sospecha razonable”. El problema consiste en que el concepto de “sospecha razonable” y cuáles son sus límites no quede a juicio de la autoridad policial sino que dependa de una clara normativa legal.

La crisis inmigratoria que enfrentan Europa y Estados Unidos y la ilegalidad de la situación que ha creado pone todas estas consideraciones sobre el tapete como consecuencia directa de políticas corruptas y prácticas abusivas de contratación que han propiciado en el pasado una corriente inmigratoria descontrolada. Muchos que han ingresado a esos países de forma ilegal han sido víctimas de esas políticas y prácticas. Su temor a las represalias los forzaba a aceptar condiciones de trabajo y salarios miserables en beneficio de numerosas industrias que basan sus utilidades en esa extremadamente barata fuerza laboral. Estas mismas industrias han promovido solapadamente en la legislatura de sus países numerosas restricciones que sirvieron para reducir a un mínimo la inmigración legal de trabajadores, fomentando indirectamente el ingreso ilegal de quienes lo hacen en busca de trabajo.

Cualquier reforma migratoria debe tener en cuenta estos hechos y circunstancias y penalizar con firmeza a las empresas que contraten a sabiendas a inmigrantes que hayan ingresado o permanecido ilegalmente en el país. Una ley como esa debe ser también coherente con los valores humanitarios, apoyar a las familias y proporcionar a los inmigrantes que respetan la ley y son buenos trabajadores los medios legales de obtener la residencia legal y la eventual ciudadanía. Debe facilitar los medios para contratar a extranjeros que ingresen al país con visas de trabajo debidamente solicitadas por sus empleadores de conformidad con las necesidades del mercado laboral y amparados por normas que protejan sus derechos y la legalidad de sus contratos. Con esas normas muchos trabajadores ingresarían al país con visas transitorias y estarían dispuestos a ir y venir, sabiendo que el regreso temporal a sus países no les cerraría las oportunidades.

La ilegalidad no puede tolerarse por la sencilla razón de que los gobiernos tienen una obligación de proteger a sus ciudadanos. En Estados Unidos muchos inmigrantes obtienen documentación falsa para trabajar, obtener un permiso de conducir y pedir crédito. El robo de identidad es el aspecto más temible de esta práctica. Aunque aspiremos a que los ciudadanos sean compasivos y comprensivos, toda sociedad tiene la obligación primordial de proteger a quienes viven dentro del cumplimiento de la ley y el orden. Y el robo de identidad es una de las peores pesadillas que puede experimentar un ciudadano honesto, que puede ver su vida arruinada por esa práctica. Por añadidura, cualquier estado de ilegalidad provoca muchas situaciones de fraude y engaños o incumplimiento de crédito que no pueden tolerarse con una falsa pretensión “humanitaria”. Aparte de la indiscutible amenaza terrorista y del alto porcentaje de los que aprovechan su ingreso ilegal a cualquier país para hacer dinero fácil con el tráfico de drogas, es un hecho que quien ingresa ilegalmente a otro país lo hace en perjuicio de sus compatriotas que intentan ingresar legalmente en busca de trabajo. El ciudadano honesto que pide visa y sigue las reglas del juego ve cómo se demoran sus aspiraciones indefinidamente, cómo los trabajos que podría haber desempeñado son arrebatados por quienes aceptan salarios más bajos y peores condiciones debido a su ilegalidad y cómo pierden oportunidades por culpa de quienes audazmente les han pasado por delante ilegalmente.

La compasión y hasta nuestro propio interés egoísta deben impulsarnos a dar un trato justo a todos los inmigrantes para que tengan oportunidades adecuadas a cambio de los aportes que pueden ofrecerle al país que los acoge. Además, los que hayan cometido delitos deben ser tratados con respeto absoluto por sus derechos humanos. Es lo menos que puede esperarse de una sociedad respetuosa de la ley y el orden. Sin embargo, es incorrecto promover campañas destinadas a bloquear leyes y ordenanzas justas que estén destinadas a frenar la ilegalidad en las prácticas migratorias. Para ser justas. estas leyes deben garantizar la estabilidad y facilitar la inmigración legal, así como también el trato humanitario a quienes hayan cometido actos ilegales. Debemos oponernos a las disposiciones abusivas que puedan contener y corregirlas debidamente dentro de los parámetros de la justicia.

Dentro de estos parámetros, es indispensable que comprendamos que la legalidad es imperativa para cualquier sociedad que desee prosperar.

Tema muy delicado y que Arizona ha colocado en el tapete.

Primero, que no solo los católicos tenemos catadura moral, los Anglicanos o Hebreos tambien la tienen, al menos sus Dogmas asì lo dictaminan, pero como en nuestra religiòn, no depende de las normas sino del compromiso y cumplimiento personal que de ellas se haga.

Segundo, el problema no es la ley. El problema son los que bajo el amparo de esta ley, aprovechan para abusar de los inmigrantes, repito no es la ley, son los abusadores que contratan este tipo de mano de obra, a la que por cierto ellos mismos acceden ya que es el modo de mandar una remesa de dinero a casa.

Algùn acto puede estar mal, pero si ambas partes hacen un trato, aunque sea de palabra, no es culpa del estado, alguien ofrece algo y alguien toma ese algo si lo desea...

Tercero, y para finalizar, cuando vea izar la Bandera de un grupo de inmigrantes, protestando por un tema distinto a los que los atañe, como una marcha pacìfica por los Cubanos, las Damas de Blanco o el Asesinato de Orlando Zapata Tamayo, háganmelo saber y cambiarè mi opiniòn al respecto de los inmigrantes, sobre todo de los mexicanos

La inmigraciòn ilegal hay que pararla, para eso se dictan leyes, leyes por cierto sólo cuestionadas por los que las infringen

Yo no puedo aparecerme en casa de alguien sin que me haya invitado, de hacerlo buscarìa el modo de que no permaneciera ahì, dentro de mi casa. Por otra parte, si me da un infarto, ¿tu debes cargar con mis gastos médicos porque me dio el infarto dentro de tu casa?

Serè una pèsima catòlica, pero eso de poner siempre la otra mejilla, yo no lo empleo en mi vida diaria, las cosas son como son y no le doy mas vueltas

Pido disculpas a los que intervienen en este tama y pudieran sentirse molestos, soy consciente de mi posiciòn intransigente en este tema

Claro que no, Elena. Es muy respetable la moral de otras religiones. Sólo me refería en el artículo a la cultura occidental, basada sobre principios cristianos.

En cuanto a la cuestión de si protestan los inmigrantes por otras causas, como la cubana, es comprensible que no lo hagan porque el ser humano suele ser egoísta en la defensa de sus intereses particulares. Si acaso, en el caso de Estados Unidos y México, podríamos señalar las agudas discrepancias entre lo que el gobierno méxicano exige de Estados Unidos y lo que está dispuesto a conceder en su país a los inmigrantes de otras partes. A nivel de gobierno, es evidente que no hay coherencia por parte de los mexicanos ni voluntad política para tomar medidas que frenen el abuso y la crueldad que enfrentan los inmigrantes centroamericanos y cubanos en México.

Esta reflexión sobre un asunto tan candente de la emigración contiene una propuesta balanceada y justa. Los gobiernos deben reconocer la necesidad de traer personas para trabajos específicos que no requieren altos niveles de calificación. Esas personas tienen derecho a entrar en los países de alto nivel pero deben hacerlo por medios legales y los gobiernos deben ayudarlos con leyes apropiadas.

Los terroristas entre los inmigrantes ilegales no es lo que provoca leyes como la de Arizona. El miedo principal aqui entre la gente que son militantes en esta polemica en contra de la inmigracion ilegal es el miedo a ser inundados por gente con un color de piel y una cultura diferente a las de los militantes.

Un punto que hace Gerardo que se necesita resaltar es que muchos de estos "ilegales" vienen ya con su destino geografico definido. Es decir, estos trabajadores vienen aca a trabajar con salarios bajos y pobres beneficios medicos donde son los mismos trabajadores los que pagan por su mayoria, si es que reciben beneficios.Yo me acuerdo haber sido asignado el trabajo de organizar una planta del correo postal en Greensboro, NC que fue privatizada y los privatizadores despidieron a todos los trabajadores que tenia la planta previamente y trajeron la gran mayoria de los nuevos trabajadores de Mexico. Por supuesto, le pagaban menos de la mitad del salario anterior y los beneficios medicos fueron reducidos para solo al trabajador y con un costo significante al trabajador cuando antes era completamente gratis para el trabajador y su familia.

Por cierto, es bien importante que la comunidad cubano-americana se envuelva en defensa de los inmigrantes. Toda otra nacionalidad latinoamericana en su mayoria, incluyendolos puertorriquenos quienes son ciudadanos, han tomado este asunto como uno propio. Nosotros hemos gozado de privilegios que nos hacen "diferentes" a otros latinoamericanos. Si queremos seguir teniendo influencia dentro de la comunidad latinoamericana debemos luchar junto con ellos cuando se abusa a los de nosotros. Como bien decia Martin Fierro "Los hermanos sean unidos porque esa es la ley primera, porque si entre ellos se pelean se los devoran los de afuera." Por eso debemos apoyar la propuesta del Senador Robert Menendez de que no se juegue el "Juego de las Estrellas" de beisbol en Phoenix, Arizona en el 2011.

La sensata participaciòn de la Srta. Olympia me encantò, en pocas palabras dictamina lo ideal.

Sr. Cañizares solo una puntualizaciòn:
Los Cubanos no llegan de ilegales a USA, esa es la diferencia con los Mexicanos o con cualquier otro "visitante" que se queda en USA, creo que para entrar un Cubano deben tener todo en regla y no por un tiempo limitado, sino casi que entran ya con todos los tràmites arreglados para quedarse, esa es la diferencia.

Las empresas que laboran bajo el marco de la ley, otorgando a sus empleados los beneficios que les corresponden, no tienen en sus plantillas a inmigrantes ilegales, eso es trabajar al lado de la ley, los que explotan a los ilegales deberìan pagar por ese delito, pero no son los causantes de la mano de obra barata ilegal.
En todo caso esa ilegalidad afecta a los trabajadores de cada estado, que ve mermada la demanda de empleos ya que estàn copados por los extranjeros.
En Mèxico no se si son las leyes, si son los sindicatos, pero allà no le hacen fàcil la vida al que quiera quedarse en su paìs, allì no hay ni la mas remota esperanza, ellos si defienden sus fuentes de trabajo.
Cuando se toman decisiones como estas, siempre hay un costo que pagar, pero que el propio presidente de EEUU se venga en contra de esta ley que no perjudica a nungùn estado, me pareciò lamentable, no se puede estar con Dios y con el diablo, simultàneamente.
Bravo por Arizona que agarra el toro por los cuernos, al menos diò un paso al frente en este delicado tema.
Saludos
Elena Blanco Garcìa

Mientras haya esperanza de una mejor vida van a existir inmigrantes. Aca en los Estados Unidos como hemos dicho anteriormente muchos inmigrantes "ilegales" son encaminados hacia sitios de trabajo que los esperan con mucho gusto ya que se aseguran de trabajadores a mucho menos costo que los nativos y sin derechos legales.

Yo diria que esos 12 millones de ilegales, los cuales ya mucho de ellos llevan largo tiempo en este pais, muchos se han ganado a traves de su comportamiento social el derecho a legalizar su vida en este pais. Pero primero de todo se tiene que aceptar el concepto que la gente emigra por necesidades economicas. Si se acepta ese concepto entonces se puede aceptar el concepto de juzgar a la gente de acuerdo a su comportamiento. Es dificil pensar que esto expuesto aqui se convierta en realidad, ya que la razon economica por las cuales muchos ilegales han sido mantenido en la oscuridad es precisamente para que puedan ser explotados. Es dificil pensar que los Democratas puedan conseguir pasar legislacion que proteja los derechos de estos indocumentados cuando los Republicanos tienen dos razones principales para mantener el status quo.
1) La explotacion economica

2) la ventaja politica que se puede obtener a traves de mantener al pais en una zozobra a razon de esta situacion.

Hay quienes afirman que América Latina "aún no ha sufrido el tema del terrorismo criminal", pero sí lo han sufrido EEUU y España. Las brutales fechas de actos criminales el 11-S-2001 (Torres Gemelas) y el 11-Mz-2004 (Estación de Atocha) respectivamente sirvieron para asesinar a 3,000 ciudadanos (2,000 en EEUU y 1,000 en Madrid). Estas fechas ya quedaron para la Historia. Y no olvidemos tampoco a Londres el 5 de Julio, 2005, donde prepararon la muerte de ciudadanos en el Underground y un Coach (Bus).

Sí puedo transmitir un pensamiento ahora volátil, pero uno que está justificado por dichas realidades en el ejercicio de la maldad y principios del islamismo brutal, cuyo máximo objetivo es apoderarse de territorios como Gaza y Líbano, por ejemplo y establecerse con máximo control de gobierno para no dar marcha atrás. También han trasladado ese propósito para América Latina ya que existen poblaciones susceptibles de dejarse influir. ¿Por qué si no algunos países están aplicando fondos para enseñar lenguas ajenas a América Latina?

Hugo Chávez ha hecho acuerdos con Ahmadinejad de Irán, que dispone de mucha existencia de uranio. Es otro loco en esta posible guerra que no reconoce fronteras. El peligro emerge porque Chávez ha pactado con Ahmadinejad y algún otro loco de la América Latina. Como todo en la vida, hay que actuar previamente, no "después de" porque entonces la solución es mucho más peligrosa y difícil. ¿Saben ustedes qué proporción de población musulmana/islámica está dispuesta a volcarse en actos criminales como los ya citados? Algunos ayatollahs han manifestado que "sólo un 10%". ¿Saben ustedes cuánta población mundial está ejerciendo de posibles guerrilleros representando un 10% de la población mundial de musulmanes? No menos de 115 millones de fanáticos alocados que pretenden hacer cumplir sus objetivos de El Corán??? Hasta creen que tienen 72 doncellas esperándolos en el Paraíso.....

Vivo entre dos mundos. Vivo entre dos miedos. En uno, en Europa, donde paso buena parte del año, formo parte de los atemorizados. En el otro, en Estados Unidos, pertenezco a los que atemorizan. Me explico: en Europa, la corriente principal de la sociedad o mainstream sufre atormentada por la creciente presencia de personas de religión islámica.

Cincuenta y cuatro millones de musulmanes viven en Europa. Según afirma el parlamentario holandés Geert Wilders, en sólo 12 años el 25 por ciento de la población europea será mahometana. Esa ya es la proporción en varias ciudades: Amsterdam en Holanda, Marsella en Francia y Malmo en Suecia. De acuerdo con la proyección demográfica, a fines del siglo XXI, impulsados por una tasa de natalidad mucho más intensa, quienes se identifican con el Islam serán mayoría en el Viejo Continente.

En Europa se les atribuye a estas personas, especialmente a las de origen árabe, una frágil identidad cívica y un débil arraigo nacional. De acuerdo con el Pew Research Center, la mitad de los musulmanes radicados en Francia, muchos de ellos nacidos allí, aseguran que su lealtad religiosa es más poderosa que la que los vincula a la nación a la que pertenecen. Otra institución citada por Wilders, el British Centre for Social Cohesion, afirma que en Gran Bretaña una tercera parte de los estudiantes desearía que el mundo viviera bajo la autoridad de un califato.

A numerosos europeos les molestan las mujeres con velo o burka, los guetos excluyentes, la proliferación de las mezquitas, el antifeminismo, la intolerancia inherentes al Corán y el sordo respaldo al terrorismo islámico: un tercio de los musulmanes franceses no rechazan a los terroristas suicidas. A muchos europeos, además, les irrita no poder exhibir su enojo con la situación porque la ``corrección política'', en nombre del multiculturalismo, exige mostrar una risueña indiferencia ante esta minoría.

¿Qué temen, en suma, millones de europeos? Temen que el creciente peso demográfico de un segmento étnico-cultural ajeno a la tradición y a la historia blanca y cristiana de la región, enemiga de Occidente durante el milenio medieval, acabe por convertirse en la fuerza dominante de la sociedad y termine por imponer sus valores retrógrados y su cosmovisión antiliberal.

Cruzo el Atlántico. La otra parte del año suelo pasarla en Estados Unidos. En el último viaje a Miami me recibe un letrero antihispano. Dice: ``Latinos no. Tacos no''. Han hakeado la cartelera electrónica de una autopista para escribir ese texto. La asociación entre latinos y tacos forma parte del estereotipo. La idea platónica de los hispanos es un mexicano. En Miami hay pocos mexicanos, pero la confusión es razonable: el 80 por ciento de los cuarenta y cinco millones de hispanos son mexicanos.

Muchos ``anglos'' y afroamericanos sospechan de los hispanos. Les preocupa el aumento notable de este grupo, el uso frecuente de la lengua española y las costumbres diferentes. Todos los días confirman el dictum famoso: la lengua más extendida del mundo es el broken English. Los hispanos ya constituyen la mayor minoría del país, pero en torno al 2050 será el segmento étnico mayoritario. Serán unos cien millones y habrán superado el número de anglos. Ya hay varias ciudades abrumadoramente hispanas: Miami, Hialeah, Coral Gables, El Paso, Los Angeles. Son más de veinte. Pero el dato más sobrecogedor es otro: en más de 200 ciudades norteamericanas se ha detectado la presencia mafiosa de los cárteles mexicanos con sus secuestros y crímenes.

Arizona, por su proximidad a México, es uno de esos campos de batalla. La legislación ``anti inmigrantes ilegales'' que acaba de aprobar tiene relación con estos hechos violentos, pero el espíritu de la ley (no la letra) es antihispana. Son decenas de millones los norteamericanos que silenciosamente detestan que su país cambie de perfil cultural. Algo parecido a lo que sucede en Europa con la presencia de la minoría islámica.

No estoy comparando las actitudes de los hispanos en Estados Unidos y los mahometanos en Europa. En general, los hispanos tratan de integrarse a la cultura central del país, son cristianos y no aborrecen el sistema político y económico de Estados Unidos. Al contrario: acudieron al país en busca precisamente de ese tipo de convivencia. Lo que me parece curioso es que los dos grandes centros políticos y económicos de Occidente, tanto Estados Unidos como Europa, perciban que su identidad esté en peligro. Y a lo mejor están en lo cierto: Occidente está mudando de piel. Parece que es un proceso lento, largo, muy doloroso y permeado por el miedo.

Ha sido realmente Grato leer su escrito, hasta ayer en la noche pensaba que todos se habìan ido de la mano de los arabes, en contra de Israel, las condenas no se terminan y con asombro no veo que se justifiquen los ataques que los arabes o musulmanes perpetran contra ciudadanos inocentes.
El tema de los musulmanes y el peligro que esta cultura encierra es tan latente como la vista gorda que se hacen todos los estados del mundo.
La semana pasada anunciaban en Antena3 (Tv de España) un programa en el cual un periodista se habìa podido meter en un grupo en Venezuela para ser entrenado por uno de esos musulmanes.
Desde que chavez està en el poder, la migraciòn de esa gente es sùmamente considerable, ya en las calles es normal verles, a veces hasta sus autoridades religiosas dan sus discursos alienantes en plena calle, yo los he visto en el Boulevard de Sabana Grande.
Estamos ante la cultura del MAL, bajo una optica religiosa, solo un nuevo diluvio nos podrà limpiar de tanta zaña que se ha sembrado.
Este tema da para tanto que nos podemos instalar por semanas en el
Gracias
Elena Blanco Garcìa