Cultivamos Una Rosa Blanca se une aquellos que opinan la muerte de Fidel Castro es el principio del fin de una tiranía de más de cinco décadas.
Fidel no fue más que megalómano sin capacidad de gobernar un país a través de un sistema democrático, por lo que tuvo que valerse de la demagogia y la fuerza. Su excusa de “elecciones para que” no fue más que su conocimiento que, de haberse celebrado elecciones libres y democráticas en Cuba, hubiera recibido el repudio de la gran mayoría del pueblo cubano y nunca hubiera llegado a disfrutar del poder y fama de la forma que lo hizo. Los hombres cercanos que ayudaron al triunfo de la revolución y llegaron a su lado en un tanque victorioso a La Habana, descubrieron temprano en los días revolucionarios la traición a sus ideales por parte de Fidel y sufrieron encarcelamiento o muerte temprana como el Comandante Huber Matos y Camilo Cienfuegos.
Fusilamientos en la noches sin despedidas de jóvenes con ilusiones para una Cuba demócrata como William le Sante fusilado en la Fortaleza de la Cabaña el la madrugara del 18 de enero de 1961, miembro de la Compañía Cubana de Electricidad por el gran delito de participar la tarde anterior en una protesta pública por las calles de La Habana condenando la cesantía de varias decenas de compañeros de trabajo, y el nombramiento por decreto de una directiva comunista.
Miles de cubanos fusilados sin juicio o juicios de circos. Suicidios, familias divididas, actos de repudio, éxodo, gusanos y esbirros. Colegios privados y católicos destruidos; curas y monjas desterrados en cuestión de horas; indefensos jóvenes hombres y mujeres obligados a trabajar como esclavos y separados de la familia, otros “acusados” vilmente de homosexualidad en campos de concentración en la UMAP, un plan genocidio para eliminar y castigar aquellos que no consideraba aptos para "su" revolución. Todo para dar escape a su complejo de inferioridad, de no haber sido nunca aceptado ni en el colegio ni mucho menos en la Universidad por los estudiantes, donde el líder de la Federación Estudiantil Universitaria era, José Antonio Echeverría y Fidel ni se nombraba en 1957 cuando un grupo estudiantil asaltó al Palacio Presidencial.
Fidel solo sabía infundir el terror al no poder, ni saber, ni estar capacitado para gobernar una nación y por eso creo un gobierno de partido único que no le hiciera sombra. Un individuo incompetente con complejo de inferioridad por las burlas recibidas por su condición de bastardo que trato de superar su ineptitud tratando de convencerse a sí mismo que era un líder al que se le seguía incondicionalmente. Un líder lleno de fantasías delirantes de poder, relevancia, omnipotencia mirándose en el espejo como la bruja de Blanca Nieves preguntándose si había algún otro mejor.
Un pobre miserable apoyado por una comunidad internacional que sonreía en su presencia mientras miraban a otro lado, ignorando los cientos de miles de cubanos abandonando la Isla día tras día, cerrando los ojos ante la muerte de jóvenes inocentes en una avioneta en aguas internacionales, la masacre de niños y mujeres del Remolcador 13 de Marzo, que dejo 41 muertos y 10 era menores de edad, la toma de la embajada del Perú que provocó la salida de miles de cubanos por el Mariel y el mayor éxodo a través de Camarioca en 1965 donde cerca de 250,000 huyeron de la Isla. Balseros huyendo de la miseria aún siguen llegando y un número de muertos en la travesía que no se sabe cuantos son.
Fidel solo tuvo capacidad para crea una ineptocracia, un sistema donde los menos capaces de gobernar correctamente, son elegidos por los menos capaces de producir libremente creando el derrumbamiento económico y político de una pequeña isla que economicamente estaba por encima de naciones mucho más grande y poderosas. Que osadía la de Cuba pre revolucionaria. Como permitir ni aceptar que en una islita con un territorio de escasamente poco más de 104,000 kilómetros cuadrados el salario de los trabajadores agrícolas fuera de $3 dólares diarios, séptimo en el mundo y segundo en el Hemisferio americano y el salario industrial de $6 dólares diarios, segundo en este Continente. İQue atrevimiento, que se jodan!
El castrismo arruino a un país que estaba a la cabeza de países desarrollados en 1959 y lo convirtió en una nación de libretas de racionamiento, donde la leche se obtiene solo para menores de siete años, la casas se derrumban como castillos de naipes, una reforma agraria prometida donde las tierra están sin cultivar cubiertas de marabú, la zafra azucarera disminuyendo cada año, centrales abandonados, apagones, aguas negras corriendo por las calles y hasta el carro fúnebre que llevaba las cenizas del “comandante”, quedó parado por el camino teniendo que ser empujado hasta llegar al cementerio.
Fidel tuvo que valerse de la mentira, división, terror, guerrillas, ideología de odio para poder obtener una miserable página en la historia y la idolatría de histéricos. El castrismo solo se ha mantenido en el poder primero, por la envidia universal hacia la potencia de Estados Unidos; segundo, por la mediocridad de gobernantes mayormente latinoamericanos que han querido ser, pero no han podido, y tienen que valerse de las artimañas del fidelismo para continuar en el poder. Chávez, Maduro, Evo, Ortega y otros de pocos méritos que solo han podido llegar a ser noticia de tercera plana trabajando bajo el tutelaje del castrismo. Hombres de poco valor más ineptos que el mismo Fidel.
Pero el día ha llegado. El maestro ha muerto. Los discípulos se quedan sin mentor y el examen final se aproxima.
Los que creemos en democracia y el respeto a los derechos humanos estamos consciente que se aproxima el momento que Cuba sera una Republica libre y democrática; una patria para todos y el bien de todos. Por ahora la lucha continua pero al final, el futuro, será nuestro
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